Carta abierta de los capítulos de las Américas de Transparencia Internacional
Estimados Jefes de Estado y de Gobierno,
Nosotros, los capítulos de las Américas de Transparency International, junto con su junta directiva y su secretariado, les instamos a que utilicen la Cumbre de las Américas de 2022 para comprometerse firmemente a abordar la crisis de corrupción, el retroceso democrático y la erosión de los derechos humanos sin precedentes que atraviesa el continente.
La corrupción alimenta la pobreza y la desigualdad e inhibe nuestra capacidad para combatir nuestros retos más difíciles, desde las pandemias hasta el cambio climático. Para construir un futuro sostenible, resiliente y equitativo, debemos tomar medidas contundentes contra la corrupción y abrir un espacio para que la sociedad civil y las personas puedan exigir la rendición de cuentas a quienes se encuentran en el poder.
Sin embargo, a cuatro años de la Cumbre de las Américas de 2018 en Lima, en la que los líderes de la región reconocieron que la lucha contra la corrupción es esencial para fortalecer la democracia y el Estado de Derecho, observamos pocos avances. Por el contrario, vemos el deterioro de los esfuerzos anticorrupción, el aumento del autoritarismo y la pérdida de derechos y libertades fundamentales, tales como la libertad de expresión, prensa, asociación y el derecho al acceso a la información.
En muchos países, el Poder Ejecutivo ha concentrado el poder, debilitando los sistemas de pesos y contrapesos y haciendo muy difícil que los órganos de control puedan ejercer y exigir la rendición de cuentas. Muy pocos países tienen poderes judiciales suficientemente independientes, tornando a esta rama del poder incapaz de investigar y castigar la corrupción y otros abusos. En ciertos casos las élites han cooptado las instituciones judiciales, bloqueando investigaciones y amenazando a los fiscales honestos para que no investiguen la corrupción y los abusos de los derechos humanos. Asimismo, la sociedad civil, las personas activistas y los medios de comunicación independientes están cada vez más expuestos a la intimidación, las amenazas, los ataques digitales y la violencia ejercida desde el Estado.
Agravada por la pandemia de la COVID-19, la corrupción también ha socavado los derechos sociales y económicos, privando a los ciudadanos del acceso a vacunas, necesidades básicas como la alimentación, el agua, la educación o la salud de calidad. Esto tiene efectos desproporcionadamente adversos en las las mujeres, las niñas, los grupos indígenas, las comunidades LGTBQ, los ancianos, los migrantes y los afrodescendientes, estratificando aún más las sociedades.
En este momento crítico, los líderes de las Américas deben aprovechar la oportunidad para aplicar políticas que apoyen la lucha contra la corrupción, la democracia y los derechos fundamentales. El Compromiso de Lima 2018 fue firmado por 35 jefes de Estado y de Gobierno, creando una agenda regional ambiciosa e innovadora para el continente. Estos compromisos plantearon una visión de futuro, e incluyeron elementos tradicionales para luchar contra la corrupción tales como el fortalecimiento de los derechos fundamentales, la transparencia y la integridad pública, así como el desarrollo de políticas para mejorar la cooperación internacional y la equidad entre géneros y etnias.
En lugar de desarrollar nuevos compromisos, les pedimos que reafirmen la agenda de Lima y asignen urgentemente los recursos necesarios para avanzar en las siguientes áreas críticas.
Fortalecimiento de la gobernabilidad democrática
Transparencia, acceso a la información, protección de los denunciantes y derechos humanos, incluida la libertad de expresión.
Financiación de las organizaciones políticas y las campañas electorales
Prevención de la corrupción en las obras públicas y en las contrataciones y adquisiciones públicas
Cooperación jurídica internacional; lucha contra el soborno, la corrupción internacional, la delincuencia organizada y el blanqueo de dinero; y recuperación de activos
Para rescatar los compromisos de Lima y proteger la democracia en las Américas, necesitamos acciones urgentes que defiendan el espacio cívico y combatan la corrupción.
Firmantes
Poder Ciudadano Argentina
Transparência Internacional Brasil
Transparency International Canada
Chile Transparente
Transparencia por Colombia
Costa Rica Íntegra
Participación Ciudadana Republica Dominicana
Fundación Ciudadanía y Desarrollo Ecuador
Funde El Salvador
Acción Ciudadana Guatemala
Transparency Institute of Guyana
Asociación para una Sociedad Más Justa Honduras
National Integrity Action
Transparencia Mexicana
Fundación para el Desarrollo de la Libertad Ciudadana Panama
Proética Peru
Trinidad and Tobago Transparency Institute
Transparency International US
Transparencia Venezuela
NOTA: Uruguay Transparente suscribe en su totalidad esta Carta Abierta de Transparencia Internacional, a pesar de no ser, en este momento, un Capítulo de TI.